Simon Sinek tiene un modelo simple pero poderoso de liderazgo inspirador; todo se basa en un círculo de oro y la pregunta "¿por qué?" Sus ejemplos incluyen a Apple, Martin Luther King y los hermanos Wright.
Simon Sinek es un optimista declarado. Con el objetivo de ayudar a construir un mundo en el que la gente vaya a casa cada día sintiéndose satisfecho por su trabajo, está liderando un movimiento audaz para inspirar a la gente a hacer las cosas que realmente los inspiran. Sus puntos de vista no convencionales e innovadores sobre los negocios y el liderazgo han atraído la atención internacional y le han puesto en órbita de grandes multinacionales, corporaciones y organismos gubernamentales.
Etnógrafo entrenado, y autor de “Start With Why”, Sinek es mejor conocido por su teoría de la «Golden Circle», un patrón natural que se basa en la biología de la toma de decisiones humana y que explica como nos inspiramos algunas personas sobre otras. Es miembro del personal adjunto de la RAND Corporation, una de las más respetadas think-tanks en el mundo, dónde enseña las comunicaciones estratégicas a nivel de postgrado en la Universidad de Columbia.
Sinek ha impartido conferencias a una amplia gama de clientes, incluyendo Microsoft,, Intel, 3M, el ejército de los Estados Unidos, miembros del Congreso de los Estados Unidos, embajadores de Bahrein e Irak y a varias agencias gubernamentales y empresariales.
Su primera conferencia en TEDx, «¿Cómo inspirar a grandes líderes?», es una de las conferencias más solicitadas y más vistas de la web.
Además, Simon Sinek es comentarista habitual y escribe ensayos para algunos de los medios de prensa más prestigiosos como: The New York Times, Wall Street Journal, The Washington Post, Houston Chronicle, FastCompany o The Huffington Post, entre otros.
En su último Libro «Leaders Eat Last» Simon Sinek defiende que muchas instituciones docentes y programas de formación se centran, no en el desarrollo de líderes, sino en la formación de directivos eficaces. Simon Sinek a través de sus conferencias intenta cambiar este paradigma y explica por qué hay que crear una nueva generación de hombres y mujeres que entiendan que el éxito o el fracaso de una organización se basa en la excelencia de sus líderes, no solo en la perspicacia de la gestión.