Gardner viaja por el mundo contando su historia. Un relato que encarna en muchos sentidos el “sueño americano” en una época en la que, en su propio país, muchos dan ese sueño por muerto.
Pocas historias son tan conmovedoras como la de Chris Gardner. Millonario, emprendedor, filántropo y conferenciante motivacional, asi como activista en favor de las personas sin hogar en Estados Unidos, situación en la que él mismo se encontró mientras criaba a su hijo Christopher durante los años 80.
Estaban solos los dos: Chris Gardner y su hijo Christopher, en un sucio y pequeño baño de una estación de tren en San Francisco. Principios de los 80, la crisis financiera y Reagan con sus medidas de austeridad. Los “sin techo” eran tantos en la ciudad, que los albergues estaban colapsados. Para los que han visto la película En busca de la felicidad, la escena es familiar. Podrán recordar a Will Smith como Gardner y Jaden Smith como su hijo. “Fue el punto más bajo de mi vida”, dice Gardner.
Pero ese momento fue más difícil en la realidad que en la versión de Hollywood, ya que ese tiempo en el baño de la estación no fueron unos días, sino semanas. En total, estuvieron alrededor de un año sin hogar, “me hacía a mí mismo preguntas difíciles: por qué pasó esto, qué pasará después. Pero lo más difícil era preguntarme cómo llegué hasta aquí. La respuesta era brutal y yo la sabía: yo me puse en esta situación”, recuerda Chris Gardner. Mirándose al espejo, dice que se encontraba con lo más duro, consigo mismo, pero que también se daba fuerzas para seguir adelante. “Si yo me había arrastrado hasta ese punto, yo también me podía sacar de ese lugar”, explica, “no puedes cambiar una situación hasta que te adueñas de ésta”.
Meses antes, su ex mujer le había dejado a su hijo y él casi no tenía dinero, porque estaba intentando algo difícil: conseguir un puesto en una empresa de inversiones a través de un programa de entrenamiento no pagado. No tenía contactos, educación ni experiencia, y sólo el mejor lograría quedar. “Yo crecí sin un padre y me había dicho a mí mismo que mi hijo nunca tendría que decir lo mismo”, recuerda. Ésa era una de las dos decisiones que había tomado cuando era niño. La otra era que quería ser el mejor, ser “clase de mundial”. Pero él era negro y pobre. Sus compañeros en el programa eran de clase alta, educados, blancos. “Habían ido al jardín infantil en Harvard”, comenta riéndose.
Sin embargo, Chris Gardner lo logró. Consiguió el puesto y, tiempo después, en 1987, se independizó y creó su propia firma financiera. En 2006 vendió parte de ésta por una cifra multimillonaria y creó Christopher Gardner International Holdings, con oficinas en Nueva York, San Francisco y Chicago.
Chris Gardner es además, el autor de su autobiografía “En busca de la felicidad”, best seller que ha sido fuente documental de la película que recibe el mismo nombre y que ha ganado, entre otros galardones, un Globo de Oro y que fue protagonizada por el reconocido actor norteamericano, Will Smith.
Su último libro, ha sido también un éxito de ventas “Start Where You Are: Life Lessons in Getting From Where You Are to Where You Want to Be”. La superación de todos estos obstáculos a lo largo de su vida le han convertido en un ferviente luchador contra el alcoholismo, la violencia doméstica, el abuso a menores y el analfabetismo y en un excelente conferenciante, capaz de transmitir al público las claves de cómo batir las probabilidades y romper ciclos.
