Mario Rodríguez Vargas es físico especializado en astrofísica. Tiene una dilatada experiencia en medio ambiente ya que su trayectoria, tanto personal como profesional, ha estado ligada a la defensa medioambiental.
Ocupó el cargo de Director Ejecutivo de Greenpeace España entre 2012 y mayo de 2021.
Actualmente es Director Asociado de Transición Justa y Alianzas Globales en la Fundación Ecología y Desarrollo (ECODES), donde ayuda a diseñar e impulsar una transición ecológica transversal que sume en positivo construyendo alianzas globales, fomentando políticas públicas y una mejor gobernanza climática que lo hagan posible.
Mario Rodríguez Vargas comenzó a trabajar en Greenpeace en 1992, en una campaña de Greenpeace Internacional para la eliminación del cloro en la producción de la industria papelera. En 1993 Greenpeace Internacional le encargó poner en marcha la Campaña de Bosques en España, de la que fue responsable durante cerca de 10 años y donde desarrolló un intenso trabajo por la protección de la Amazonia y de los últimos bosques vírgenes del planeta. Posteriormente, desde 2003 dirigió durante otros diez años las estrategias de las campañas de Greenpeace.
Como Director Ejecutivo de Greenpeace España coordinó la gestión diaria de la organización, siendo su representante público ante el mundo político, económico, social, y ante los medios de comunicación. Con su labor ha conseguido que Greenpeace sea un referente medioambiental en España.
Mario Rodríguez Vargas vivió el anuncio de una transición ecológica justa hacia una economía descarbonizada, el comienzo del fin de la era del carbón y de la era nuclear y la constatación de la viabilidad de un horizonte 100% renovable, entre muchos otros avances.
Durante esta etapa logró consolidar una organización más fortalecida, con más de 140.000 socios y con una mayor capacidad de actuación, y preparada para hacer frente a los retos que nos plantean la emergencia climática y la pérdida de biodiversidad, en un contexto agravado por la crisis sanitaria y la necesidad de impulsar con urgencia una transición justa.
En sus conferencias, Mario Rodríguez Vargas defiende que, a nivel nacional, la ley de cambio climático y el plan de clima y energía deben ser más ambiciosos y “aspirar a reducir las emisiones (de gases de efecto invernadero) un 55% respecto a 1990 para 2030”.