Miguel López-Alegría, astronauta nacido en Madrid, ha realizado seis misiones espaciales desde que fue seleccionado por la NASA en 1992. Aunque vive en Washington, mantiene un fuerte vínculo con sus raíces españolas. López-Alegría destaca que la exploración espacial es parte del ADN humano, impulsada por la curiosidad innata de descubrir lo desconocido. Actualmente, la actividad espacial está evolucionando hacia un modelo comercial, donde empresas privadas juegan un papel clave en la explotación de recursos en otros cuerpos celestes, como el hielo en la Luna.
López-Alegría menciona que aunque los viajes espaciales son costosos, el mercado podría seguir la tendencia de la aviación comercial, donde los precios se reducirán con el tiempo, haciendo más accesible el espacio. Sobre la vida extraterrestre, opina que es probable su existencia, pero debido a la vastedad del universo, es poco probable que la humanidad llegue a encontrarla.
Hoy en día, López-Alegría lidera Axiom Space, una empresa que aspira a construir y operar una estación espacial privada, ofreciendo viajes espaciales a clientes particulares y naciones sin infraestructura espacial. Además, en su tiempo libre, disfruta de actividades como cocinar, especialmente paella, y visitar lugares que ha observado desde el espacio.
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